Organizado por Álvaro Labarra, Pablo García y Sergio Recuero en colaboración con el Excelentísimo Ayuntamiento de Sacedón, con las gradas prácticamente llenas de un público entregado, se celebró el ya tradicional y prestigioso desafío de recortadores con doce especialistas de Guadalajara y otros lugares de España más tres jóvenes promesas, que se las vieron con astados de la ganadería Cerro Longo, todo ello narrado, explicado y amenizado por la voz inconfundible de David García.
“Abrió fuego” Javier Pradanas, que junto a Fede González (que salió sustituyendo a Raúl Moreta), Alex Felipo “Pipo” (que lució la camiseta de “Peta” recientemente cogido), y Rafa Espada conformaron el primer cuarteto de la noche. El de Guadalajara, que puso toda la carne en el asador, pasó a la final.

David Ramírez “Peque”, Andrés Solano “Canelita”, Javi Pérez (que vino en sustitución de su maestro Pakito Murillo, también lesionado) e Iván Cachero se midieron con el segundo de Cerro Longo. El de Arganda, 29 años tiene el mozo, pero no de edad sino de temporadas en activo en este noble arte, pasó a la final. El jurado decidió que el de Chozas de Canales accediera también como mejor segundo de todos los grupos. Destacar el brindis del de Marchamalo a Álvaro Labarra
Sergio Vega “Perla” (que actuó en lugar de Sergio Recuero, todavía resentido de una lesión), Pablo García, César Grasa y Álvaro Sánchez formaron el tercer grupo de la fase clasificatoria. El de Romanones vino a por todas, tiró de repertorio, del que tiene para dar y tomar, y con un ajustado recorte, un salto en corto y un quiebro de rodillas se aseguró el pase a la final.

Mientras el jurado deliberaba pudimos disfrutar de la exhibición de tres jóvenes promesas que vienen pisano fuerte, Óscar Sanz, Raúl Benito “Raulillo” (que jugaba en casa y se metió al público en el bolsillo) e Iñigo Gutiérrez.

Ya en la final, Rafa Espada se dispuso a ejecutar uno de sus arriesgados saltos a porta gayola, pero tuvo que “abortar la operación” en el último instante, cuando ya estaba a punto de batir, al percatarse de la catadura del toro. Anduvo rápido de reflejos el de Guadalajara ya que el animal, de buena planta eso sí, no tenía ni un pase, literal, y tras dar evidentes pruebas de mansedumbre fue devuelto a los corrales.

El arriacense volvió a colocarse ante el “portón de los sustos” y esta vez sí pudo recibir con un tirabuzón a porta gayola al “toro suplente” de la final. Un salto y un recorte le valieron al de Romanones el cuarto trofeo de la noche. Un salto del ángel y un tirabuzón en corto permitieron a Javi Pérez hacerse con el tercer premio. Su característico quiebro de rodillas y un recorte fueron los responsables de que el de Arganda se llevara “la medalla de plata”. Por su parte el de Guadalajara completó su porta gayola con un ajustado recorte, lo que le valió alzar el trofeo que le acredita como campeón de la capital de “El Mar de Castilla”, bajo la atenta mirada de admiración de los tres jóvenes promesas.

Una buena noche de saltos, quiebros y recortes en la ciudad alcarreña, antaño sede del Real Sitio y Balneario de la Isabela y lugar de termas desde los tiempos de los romanos. El público disfrutó y los recortadores se sintieron a gusto deleitándonos con algunos extras como saltos encadenados y al alimón para encerrar a los toros o una rondada a la que los jóvenes promesas invitaron a ejecutar al alumno aventajado de Pakito Murillo. Enhorabuena a todos, organización y participantes por la buena noche taurina de la que pudimos disfrutar

José A. Cantarero