El de Albacete, que cortó el único apéndice de la noche fue declarado ganador, por unanimidad del jurado, en la final del certamen de novilladas nocturnas celebrada hoy 4 de agosto en la madrileña plaza de Las Ventas.
A Molina le tocó un suerte el mejor astado de la noche, el que salió en segundo lugar. Lo supo aprovechar el albaceteño y le cortó la única oreja del festejo. Calerito y el Niño de las Monjas se fueron sin tocar pelo, aunque no les faltó empeño y voluntad.
Casi 8.000 personas acudieron al coso de Las Ventas, donde se lidiaron seis novillos toros de Fuente Ymbro, de presencia “adecuada” que dieron juego desigual.
Juan Pedro García “Calerito”, de azul noche y oro: se despachó con estocada delantera contraria a su primero (silencio); y metisaca caído, media estocada desprendida y varios descabellos al cuarto de la noche (silencio tras aviso).
José Fernando Molina, de verde esmeralda y oro: media estocada perpendicular (oreja), y estocada desprendida. Vuelta al ruedo tras petición de oreja que el presidente esta vez no concedió.
Jordi Pérez “Niño de las Monjas”, de mandarina y oro con remates negros dejó una estocada baja a su primero (ovación), y dos pinchazos, estocada trasera tendida y tres descabellos al que cerró plaza (silencio).
Cabe destacar también a Fernando Casanova en la brega del segundo y Daniel López picando al quinto.
Como anécdota de la jornada reseñar la fuerte tormenta que descargó al finalizar la lidia del primer astado. El buen drenaje del coso madrileño cumplió su función, y tras el aguacero se pudo continuar el festejo con el albero prácticamente seco.
Redacción Va de Toros